lunes, 26 de octubre de 2015

Objetos extraños - 29 de Septiembre

Nuestros tripulantes, de diferentes guardias de mar y en horarios distintos, realizaron el avistamiento de luces extrañas, como objetos voladores, unos encima del buque y otro a un costado, que de un momento a otro desparecieron, pero antes de entrar a ampliarles las historias, les cuento que realicé una búsqueda rápida en internet (con el poco que tenemos) sobre el avistamiento de objetos voladores en el Océano Indico y encontré que es común ver luces que se reflejan en el agua, así como de objetos que sobrevuelan en ésta área. Lamentablemente nuestros tripulantes no alcanzaron a obtener un registro de dichos eventos.

El primer evento ocurrió el 9 de septiembre, dos días antes de llegar al puerto de Fujairah en los Emiratos Árabes Unidos, cerca de las 0615 de la mañana, hora del orto del sol, cuando el Marinero Segundo Abel Vásquez, se encontraban en la cubierta de señales (parte externa del buque donde se izan el pabellón o diferentes banderas) izando el pabellón nacional de acuerdo a las tradiciones navales y al amarrar la driza (cabo o soga con la cual se sostiene o amarra el pabellón) miró hacia el cielo para verificar que el pabellón no se hubiera atascado o enredado con alguna antena, cuando vio dos luces extrañas que se dirigían hacia la proa (parte delantera del buque), “las luces tenían un tamaño peculiar y muy grande para ser un avión, con una velocidad muy rápida en comparación con esos artefactos. Inmediatamente llamé a la guardia para que salieran al puente y verificaran lo que estaba viendo”, explica el Suboficial.

Un personal de la guardia salió al alerón (término dado a la parte exterior del puente de mando) y el otro se quedó verificando la navegación, “todos estábamos observando las luces y de pronto se separaron hacia los costados del buque y desaparecieron”, comenta el Marinero Vásquez.

El Marinero Segundo Edilberto Jiménez, al respecto comenta “parecían dos naves, la luz era blanca bien fuerte y clara, clara; no alcanzamos a verlas mucho tiempo y de pronto desaparecieron”.


Para el Suboficial Tercero Danuil Pallares, las luces se encontraban muy altas, “en un momento una de ellas se quedó quieta a la altura del mástil y la otra hacía movimientos en forma triangular. Yo digo con seguridad que podrían ser ovnis, nunca había visto dos luces moviéndose de esa manera y que desaparecieran tan rápido”.





Posteriormente, el 28 de septiembre sobre las 0330 de la madrugada (en este lado del mundo, estamos 9 horas adelante de la hora colombiana), en área general de las Islas Seychelles, un día antes de arribar a este puerto, el Soldado Profesional John Aguilar del Ejército de Colombia, se encontraba prestando guardia en el alerón por el costado de estribor (costado derecho), cuando vio a través del puente que en el costado de babor (costado izquierdo) apareció una luz, “me sorprendí y me fui hacia ese costado informándole al Suboficial de Guardia de la luz y verificamos en el radar si aparecía alguna marcación y no vimos nada”.

El personal salió al alerón y la luz que en primer momento se veía distante y pequeña, empezó a aumentar y acercarse al buque. Según el Suboficial Segundo José Parra, Suboficial de Guardia, “el contacto se acercó a una milla de distancia aproximadamente y había un camino de luz que se dirigía hacia el buque, cuando vimos eso, dijimos no es un contacto aéreo por que no haría eso y en el momento en que iba a sacar el celular para tomar la foto, el contacto subió, se escondió detrás de una nube pero en el agua se veía todavía el reflejo de la luz, nosotros seguimos mirando hacia el lugar, pero de un momento a otro la luz desapareció”.

El evento duró aproximadamente un minuto y medio o dos, según el Soldado Aguilar “era una luz amarilla como si viniera de un reflector, bastante fuerte y con intensidad”. El Suboficial Parra, finaliza diciendo “de los 12 años que llevo navegando, en diferentes partes de Colombia, nunca había visto algo similar, en mi opinión lo que vimos fue algo fuera de lo normal”.




            Un poco tímidos los tripulantes de nuestro buque me han contado sus historias, pero estos avistamientos hacen parte de la experiencia de la navegación a los cuales no encontramos explicación, pero que vale la pena incluir en esta bitácora de navegación y que ustedes los conozcan.

miércoles, 7 de octubre de 2015

Edición No.8 "La Fortaleza" - 25 de Septiembre



Hemos emitido la octava edición de “La Fortaleza” y su editorial dice así:

Hemos cumplido la segunda fase de las cuatro de esta misión, Las dos primeras eran llegar a España y Grecia, certificarnos y cruzar el canal de Suez por primera vez hacia África. La segunda participar en Atalanta cumpliendo las tareas en conjunto con la Fuerza Multinacional de la Unión Europea, la cual gracias a Dios se logró, además de con buenos resultados, sin novedad alguna en nuestro personal y el material.

Ahora desde nuestro reciente zarpe de Fujairah, estamos en la tercera fase, la operación Ocean Shield, fase que va hasta cuando lleguemos a Djibouti nuevamente el 17 de octubre.

Debemos dar gracias infinitas a Dios por cuidarnos, y dar gracias a esta magnífica tripulación, lo mejor de lo mejor! Este periplo ha visto maniobras navales con buques de Armada prestigiosas a nivel mundial y estas cubiertas han recibido ilustres visitantes desde príncipes herederos a la corona, pasando por embajadores y almirantes, comandantes en diferentes niveles de la operación Atalanta.

Ahora estamos trabajando en la doble tarea de mantenernos listos operacionalmente, entrenando, manteniendo los sistemas y equipos y en cumplir las tareas de vigilancia de superficie. Hemos compartido como verdaderos hermanos momentos de integración, nos hemos reído y abrazado felices. También nos hemos consolado en los momentos más duros de algunos, pero en general todos estamos fortalecidos por esta maravillosa y única experiencia.

El Comandante se ha reunido con sus tripulantes para celebrar a los mejores del mes, del trimestre, sus cumpleaños, a reafirmar valores y atributos de los caballeros y damas del mar, como son la integridad y la honestidad, pilares de una mejor sociedad y única verdadera herencia para las futuras generaciones de un país que queremos ver en paz, progresando y esforzándose para ser cada día mejor.

Miramos con expectativa el siguiente puerto, tan diferente a los dos anteriores; de ellos precisamente les aseguro que será muy difícil decir si pronto los volveremos a visitar y con completa seguridad que muy pocos colombianos podrán hablar de experiencias allí vividas, como si lo haremos nosotros. Ya son parte de nuestra memoria, ya son recuerdos que llevaremos por siempre.

Ojalá en unos años cuando se conmemore el primer crucero operacional de un buque de guerra colombiano desde los ocurridos en la guerra de Corea, nos reunamos como una logia, una cofradía de amigos a recordar lo vivido, recordarlo con nostalgia, diciendo que ese buque fue el “7 de Agosto” con sus 86 tripulantes, porque todos somos y seremos una sola unidad.

Ahora a celebrar el paso del paralelo cero, el del Ecuador, otro hito más de esta singladura sin igual. Nos vemos allí queridos neófitos del inmenso y respetado mar… Ya Neptuno confirmó su asistencia para darles el bautismo, preparaos marinos, el día está cerca!!!


Capitán de Navío Darwin Alberto Alonso Torres 


Además tenemos la historia de un fantasmita muy comelón y travieso que acosa a los tripulantes del buque, conocido en el medio naval como “El duende”:

¡EL DUENDE!

Según varios expertos en temas de lo paranormal que abordaron este buque, han registrado en sus equipos especiales y cámaras, movimientos extraños de un personaje misterioso que acosa a los Suboficiales del camarote No.3 de tripulación. Sus investigaciones, los ha llevado a la siguiente hipótesis: “El espectro o mejor conocido como “duende” en el medio naval, habita principalmente en la nevera de dicho camarote; los últimos productos afectados fueron: las bebidas del Sargento Segundo Cardona Carlos y las galletas del Suboficial Tercero Toro Edgar.

Así mismo, se le ha hecho seguimiento y se ha encontrado que hizo de las suyas, al botar a la basura las chanclas del personal de Infantería de Marina, esconder las llaves de la lavandería, desordenar las camas y dejar el baño sucio, evitando que el alojamiento se encuentre en condiciones óptimas, especialmente para la revista de bajos fondos.

Los tripulantes de este camarote, han tomado medidas estrictas para contrarrestar su actuar delictivo: guardia duende, en la cual cualquier evento anormal es solucionado inmediatamente; aseo tres veces al día, entre otras.

Durante la revista nocturna del Segundo Comandante, se le escuchó la expresión “Ya están a una encerada de quitarle el trono al mejor camarote”, en reconocimiento a las medidas contra el duende, tomadas por el personal.

Esperaremos noticias de la desaparición del duende o la afectación a otro camarote, según los expertos en eventos paranormales de nuestro buque.